Votas, o te Botan
Fernando Alés.
Junio/25.
"La derecha gobierna para 200 familias y eso no da los votos suficientes, por eso, para ganar unas elecciones, la derecha tiene que mentir"
Pues como ya va siendo costumbre en nuestra amada piel de toro, cuna y cobijo de gentes de bien, de toros, procesiones y demás tradiciones folclóricas, se va imponiendo cada vez más, la muy miserable costumbre de señalar con el dedo la paja en el ojo ajeno, para que no se vea la viga en el suyo. Que no digo yo, que no tengamos nuestra vista turbada por algún sucio asunto. Pero clama al cielo, que sean precisamente los que hacen de los asuntos sucios, los chanchullos y las corruptelas, su estilo de vida y su razón de ser, para estar en política, son los que señalan a los demás.
Todo esto viene de lejos, ya en tiempos de Paquito se actuaba así de forma constante, sin que nadie rechistara, so pena en el mejor de los casos, llevarte una buena somanta de hostias y si era menester, pues unos tiros detrás del camposanto y a abonar las florecillas del campo.
Las formas cambiaron, cuando el dictador dobló la servilleta, pero la mentalidad y la actitud, siguen igual.
Los que estaban sangrando España, lo iban a seguir haciendo; pero primero había que hacerse demócrata, porque así lo consintió un rey, puesto por un dictador.
Y todos los fachas, se volvieron demócratas de repente; seguían con su forma de pensar fascista, pero envueltos en un partido democratico, creado (que paradoja) por un ministro de Franco, que tanta paz lleve como la que nos dejó con su ausencia, pero al que todavía se le puede ver en alguna foto con el brazo en alto.
Se creó un partido de centro y otro de derechas, llenos de los mismos parásitos que nos sangraban durante el régimen y que controlaban los poderes fácticos. Como si nuestra tierra fuera un gran cortijo de su propiedad y ellos los señoritos, mientras los demás solo fuéramos esos santos inocentes que reflejaba Miguel Delibes en su novela.
Ya podíamos votar; y lo hacemos, pero la derecha más reaccionaria siempre ha estado ahí, entorpeciendo, envenenandonos a unos contra otros, mintiendonos sin vergüenza alguna.
Ya lo dijo, no sin razón, Emilio Romero, (1917- 2003) ex director de ABC: "
"La derecha gobierna para 200 familias y eso no da los votos suficientes, por eso, para ganar unas elecciones, la derecha tiene que mentir"
Y mienten pública y descaradamente, y esas mentiras nos la tragamos porque somos unos analfabetos políticos, porque siempre nos hemos creído lo que nos ha dicho el señorito. (Hablo en general)
Nos han educado, para no decirle nada al de arriba si nos está pisando, no se vaya a molestar.
Y desde esa generación de gentes sumisas o serviles nos ha quedado esta impronta de pensar que la derecha hace las cosas por el bien del país.
Esto acompañado de los lemas, contra todo lo que sea progreso y bienestar: porque eso es cosa de rojos y los rojos son lo peor del mundo, el quinto jinete de la Apocalipsis, que quema iglesias y viola a las monjas.
Si eres como dije antes un analfabeto político, no hace falta más mensaje; te lo crees a pies juntillas, porque te lo dijeron tus padres, porque se lo había dicho a ellos, el señorito.
Ahora las cosas van cambiando, hay más información, redes sociales etc.., y algo más de cultura. Pero ellos siguen en las instituciones y en los centros de poder, en gran parte por los votos que les dá la todavía ingente cantidad de analfabetos que no se molestan en pensar que ganan votando a la derecha, porque si no lo hacen van a entrar los rojos perroflautas filoetarras bolivarianos.
Ahora hablan de mafia o democracia, igual que antes señalando la paja en el ojo ajeno, cuando son ellos los que están organizados como una organización mafiosa con un ánimo indecente de lucro.
Hay un tal José Mari presidente de FAES, una fundación para ultracatólicos, ultra ricos, empresarios, jueces, periodistas y otras especies reaccionarias…; que fomenta e impulsa la ideología neoliberal, manteniendo su ideología franquista, ideando planes que controlen el sistema.
Aleccionando y adiestrando a personajes como Ayuso o Abascal, que desestabilizan el sistema, creando confusión y crispación, por encima de las más elementales normas de convivencia. Manipulando la justicia y los medios, para que los que se levantan a las seis o las siete de la mañana, sigan creyendo en lo que los señoritos les dijeron a sus padres y abuelos.
La jugada es redonda, tu trabajas y pagas tus impuestos, y esta gentuza paga y mantiene con la parte que les toca de tus impuestos a quien te miente a través de los medios y juzga a quien le conviene, según le conviene.
En resumen: pagan con tu dinero a los que te mantienen agachado, sin dejar que levantes la cabeza.
No tenemos el mejor presidente del mundo, (no creo que lo haya). Pero tenemos un presidente que los ha puesto muy nerviosos, y eso ya es algo.
Ahora somos nosotros los que debemos decir con nuestros votos si queremos democracia o seguimos votando a quien quiere que volvamos a las alpargatas y la cartilla de racionamiento.
No estoy exagerando, ahí tenemos a Argentina.
Vuelvo a decir lo mismo para despedirme:
A quien Dios se la dé, San Pedro se la bendiga.
Añadir comentario
Comentarios