Broncearse de la manera más natural.


Inmaculada Salvador Romero.

Junio/25.

 

Bienvenido Junio.

Ya está aquí, ya llegó, junio con su alegría de sol y su calor.

Y si hay algo que nos gusta a muchas personas este mes es poder dar un color distinto a nuestro tono de piel.

Broncearse ayuda a unificar el tono de piel y te da un brillo más saludable que los autobronceadores y cabinas de bronceados.

Si eres de los que te gusta tomar el sol y adquirir un bronceado bonito sin poner en riesgo tu piel este artículo te puede interesar.

 

Alimentos, Sol, y Cuidados para un bronceado Saludable.

 

Obtener un bronceado bonito y duradero sin dañar la piel, es el sueño de muchas personas durante la temporada de sol.

Sin embargo, la exposición solar no siempre es nuestra aliada si no tomamos precauciones.

Broncearse de forma natural no solo es posible, también saludable si combinamos una buena rutina de exposición solar con una alimentación adecuada y hábitos que protejan su piel. En este artículo te explico cómo lograr un bronceado natural, uniforme y seguro, sin correr el riesgo de quemaduras ni envejecimiento prematuro.

Para broncearte de forma natural y segura, debes seguir algunas reglas clave:

Elegir las horas en las que vamos a tomar el sol es una de las reglas fundamentales, debiendo evitar tomar el sol entre las 12:00 y las 16:00 horas, cuando la radiación UV es más intensa. Los mejores momentos para exponerte al sol son durante la mañana (antes de las 11:00) o al final de la tarde (después de las 17:00). Si no estas acostumbrado/a lo mejor será que comiences con exposiciones de 10 a 15 minutos al día y las incrementes gradualmente. Así evitarás quemarte, al tiempo que permites que tu piel se adapte progresivamente.

Debes tener en cuenta que el uso de protector solar no impide el bronceado, simplemente protege tu piel de los daños. Usa un bloqueador con al menos FPS 30, resistente al agua, y aplícalo cada dos horas o después de nadar o sudar. 

Si tienes piel muy clara o sensible, considera usar una crema solar con FPS 50.

Imagen: IA Alternativa Mediterráneo

Alimentación para potenciar bronceado

 

La alimentación juega un papel esencial en cómo responde tu piel al sol. Algunos alimentos pueden estimular la producción de melanina, mejorar la elasticidad de la piel y ayudar a reparar los daños solares.

Aquí tienes los principales aliados alimenticios para un bronceado saludable.

Alimentos ricos en betacarotenos.

Los betacarotenos son precursores de la vitamina A y ayudan a estimular la melanina. Además, son antioxidantes que protegen l piel del daño celular.

-Zanahoria.

-Calabaza.

-Batata.

-Mango.

-Melón.

-Papaya.

-Espinaca.

-Brócoli.

 

Un jugo de zanahoria diario durante unos días antes de la exposición al sol puede intensificar el tono del bronceado.

 

Imagen: IA Alternativa Mediterráneo

Frutas ricas en vitaminas C.

La vitamina C ayuda a mantener el colágeno en la piel, lo que mejora su firmeza y capacidad de regeneración.

-Naranja.

-Kiwi.

-Fresa.

-Piña.

-Guayaba.

Alimentos con vitaminas E.

La vitamina E tiene efecto antioxidante y previene el envejecimiento prematuro de la piel.

-Almendras.

-Avellanas.

-Semillas de girasol.

-Aceite de oliva virgen extra.

Imagen: IA Alternativa Mediterráneo

Omega 3 y agua para una piel hidratada.

Los ácidos grasos omega 3 protegen contra la inflamación provocada por el sol. Puedes encontrarlos en:

-Pescados grasos (salmón, sardinas, atún)

-Chía.

-Linaza.

-Nueces.

 

Además. Hidratarte bien es fundamental. Bebe entre 1.5 y 2 litros de agua al día para mantener la piel flexible y saludable.

  1. Cuida tu piel antes, durante y después del sol

 

Un bronceado natural se mantiene mucho mejor su tu piel está bien cuidada.

 

Exfolia tu piel (pero con moderación)

Antes de comenzar a tomar el sol, realiza una exfoliación suave para eliminar células muertas. Esto ayuda a que el bronceado sea más uniforme. No exfolies justo antes de exponerte al sol; hazlo al menos 24 horas antes.

Mantén la piel hidratada usando cremas o lociones todos los días, especialmente después de tomar el sol. Los productos con aloe vera, aceite de coco ayudan a regenerar la piel y conservar el bronceado por más tiempo.

Evita duchas muy calientes. El agua caliente reseca la piel y puede acelerar la descamación. Prefiere duchas tibias y usa jabones suaves.

Mitos comunes sobre el bronceado.

 

Son muchos los mitos que existen sobre el bronceado de la piel. Vamos a desmontar algunos: 

“Con nubes no me quemo”

Aunque el cielo esté nublado, hasta el 80% de los rayos UV atraviesan las nubes. Nunca confíes en el clima como protección natural.

“Si no me pongo protector, me bronceo más rápido”

Es cierto que sin protección la piel puede oscurecerse más rápido, pero lo que ocurre en realidad es una quemadura, no un bronceado saludable. La piel dañada se pela, y el tono desaparece pronto, dejando posibles manchas.

“El autobronceador protege del sol”

Los productos autobronceadores solo tiñen la capa superficial de la piel, no ofrecen ninguna protección contra los rayos UV.

Por último estará bien recordarte que el bronceado natural requiere de paciencia y constancia, estar bronceado/a no es algo que ocurra de un día para otro, es un proceso gradual que, cuando se hace con conciencia, deja un tono bonito, saludable y duradero. Si combinas una buena alimentación, hidratación contaste, protección solar adecuada y exposición controlada, puedes disfrutar del sol sin dañar tu piel.

Una piel bien cuidada no solo se ve mejor, además se siente mejor. Y recuerda: el mejor bronceado es aquel que no compromete tu salud.

Broncearse de una manera natural no significa exponerse sin control al sol. Significa aprovechar los beneficios del sol con responsabilidad, apoyándote en una alimentación rica en nutrientes que fortalecen tu piel desde dentro. Usar protector solar hidratante, evitar las horas de mayor radiación y mantener una rutina saludable son claves para lograr ese tono dorado que tanto gusta, sin arriesgar tu bienestar.

No se trata solo de estética. Tu piel es el órgano más grande del cuerpo, y merece tu cuidado todos los días del año, no solo en verano.

Espero que este artículo te permita el mejor bronceado y disfrute de Junio.

Nos vemos en Julio.


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