La Huella del Mal

Lector Impertinente.

Septiembre/25.

Los thrillers españoles suelen estar bien ambientados, en general. Arrancan con premisas interesantes y se van desinflando (como casi todos) a lo largo del metraje. Empiezan a aburrir, a recurrir a situaciones estúpidas, sexo gratuito, etc.

Para empezar, me parece inverosímil que ocurran crímenes en los yacimientos de Atapuerca y que pululen por allí una serie de personajes cuando en España falta poco ya para que te disparen por tirar unas cáscaras de pipas al suelo. No conozco Atapuerca, pero así de primeras, si aparece un cadáver en un terreno arqueológico como este...fácil no debe ser.

Una película que tiene que tirar de tanto desnudo y escena gratuita de sexo, es que no va a ser buena.

Los thrillers españoles suelen estar bien ambientados, en general. Arrancan con premisas interesantes y se van desinflando (como casi todos) a lo largo del metraje. Empiezan a aburrir, a recurrir a situaciones estúpidas, sexo gratuito, etc.

Poco rigor en la documentación, pues ni parecen haberse estudiado los protocolos policiales ni las características de la vida de los homínidos de hace 500.000 años. Y poco rigor en ciertas situaciones que devienen sonrojantes (la obsesión por las escenas de sexo, la pelea del bar, la busca y captura de los malos, etc)

Se puede ver, pero no esperen nada del otro mundo.

Fácilmente olvidable.

No hay futuro sin descendencia. Vaya tela. El taller de Béjar el taxidermista.
Queridos amigos, tengo el inmenso placer (además del tremendo orgullo y la gran satisfacción) y el inusitado honor de comunicaros que acabo de ver (los ojos como platos, Eyes wide shut) la película más ridícula (y grotesca) de la historia del cine, trama o argumento que solo se le pudo haber ocurrido a un enfermo o a un tío con aun admirable sentido del humor, un cachondo irredento, seguramente las dos cosas a la vez, no son excluyentes, al contrario, se enriquecen mutuamente.

Ella aguanta especialmente bien los primeros planos (él, también, aunque no tanto) y la moza o andoba lozana andaluza esa y el maromo o fulano potro otro están de toma pan y moja, tanto montan, adorno, seguro, pero aquí vinimos a las risas y así fue desde el mismo principio hasta el puritito final sin descanso, Mel Brooks se quedó corto, y Michael Cera, Raquel Welch, La Trinca, los Monty Python, toda la pesca, la peña y la basca, y la dieta paleolítica, y el resultado nos da o dio igual.

La cosa empieza con ella que (no) se quiere quedar embarazada (horror en el hipermercado, llorera, no sé por qué, pero este de algo me suena en las últimas trescientas mil películas), trauma, tabú, pero muertos hay unos cuantos espantosos, y sexo agónico tortuoso chusco funerario a cascoporro, están claras las prioridades en el cine moderno, la pirámide (la estafa piramidal) de necesidades, La conjura de los necios (como decía aquel sabio, además de La vida es sueño, de los pocos que en el mundo han sido, Viva la muerte o, tal vez mejor, Muera la vida, el orden de los factores nos la sopla).

(Borat) Sí, resurge de entre los muertos aquí como estrella invitada el gordo de aquella (aunque quizás fuera Pavarotti poseído por el espíritu poco santo de Evilio, nunca se sabe bien a ciencia cierta en estos casos tan extraños, nos confundimos) haciendo de las suyas, con su tripa en ristre como falo sardónico tan erecto violando doncellas (y además es terrible y ladino porque tortura con abrumadora crueldad y saña a su víctima, la calienta y luego la deja en la estacada, a medias, no le mete ni la puntita, solo la barriga, por eso ella se rebela y libera y empodera y pide lo suyo, desesperadamente Grita, libertad, Fóllame, por lo que más quieras, lógicamente -las ferómonas del sudor, sangre y lágrimas, de la barriga de él, además del de su frente, os ganaréis el pan, y el polvo, del camino, que hace las veces o los efectos de un lubricante, en tierra seca o árida, erial, pertinaz sequía, lluvia fresca, El manantial, maná, do mana todo, por lo menos, por si las moscas, la pusieron burra, loca, en celo, perraca, haciendo agua, El mar, la mar, Cerdita, Perdida, nos hubiera pasado a todas, no nos hagamos las nuevas ni las estrechas ahora, no seamos hipócritas- es, en términos científicos, lo que se conoce entre los psicólogos y psiquiatras, los expertos en estos temas, como la parafilia Barriguda que no Barracuda, no son lo mismo aunque tengan ciertas concomitancias o compartan algunas características, sea, la de aquellos que tienen las terminaciones nerviosas sexuales situadas ni en el clítoris ni en el glande, sí, en la panza, exacto, lo que ya dijo Cervantes hace tantos siglos de forma tan sutil como eufemística para eludir la censura franquista, y la de la santa inquisición, en comandita, todas a una, a través del personaje de Sancho, eso mismo, Panza, obviamente, de ahí el síndrome del escudero panzudo que es una forma más vulgar de indicar lo mismo, está todo inventado al fin y al cabo, la historia se repite, el eterno retorno, primero como guasa grasa y después como tragedia esperma, nunca falla ni folla, en una escena que está claramente copiada de Corazón salvaje, de tal palo, tal astilla, se nota que el puto gordo este además de salido era un gran cinéfilo -¡van unidos entrambos conceptos?, abrimos debate pistonudo, dejen en la barra de comentarios sus opiniones al respecto, por eso del algoritmo, en realidad nos importan una mierda, ni las leeremos siquiera-, un amante, como todos nosotros, del inimitable e insuperable Dafoe, y ella, claro, de la Dern, afinidades electivas que se dice, follarinas, epígonos, hijos del mismo dios, él los cría y ellos se juntan, Deseo, peligro) a diestra y siniestra.

En otro momento el río es caudaloso a lo lejos y corre que se las pela y al siguiente rato es un charquito aquí mismo, a dos escasos milímetros de tu boca, creo.
Y lo verdaderamente increíble es la sorpresa final, no se podía esperar, The Man (os: The Hands of Fate) from Earth era él, El buen alemán (tenía que ser, no me quiero extender aquí, por cierto, no es el lugar ni el momento más adecuado para ello, ya lo publicaré en mi próximo libro más por extenso, sobre las evidentes alusiones o implicaciones nazis y holocaústicas, el hombre del mazo, que supone ese dato germánico), todo encaja, Dios que lo envió esta vez en forma de, los designios del señor son inescrutables, sin terminar de hacer, a medio cocer, troglodita y que nos lo volvieron (dale Perico al torno, erre que erre, el hombre, y el Dios, es el único animal que tropieza dos, o doscientas mil, veces en la misma piedra, esa misma piedra -como la quijada de burro de la Biblia, Caín o Sansón mediante- o pedrusco que utilizaron tanto la chica como el buen salvaje como arma arrojadiza, dolosa, criminal, o no tanto, en verdad, seamos justos, con las más purificadoras intenciones, que el polvo vuelva al polvo, grano que cae en la tierra y muere da mucho fruto, de lo contrario es nulo, debido a su gran peso simbólico, el que esté libre de pecado que tire o arroje la primera piedra de La vida de Brian, claro, o no dejar piedra sobre piedra de los evangelios de Mateo y Lucas, Piedrahíta- todo rima y casa una vez más en mis críticas no por casualidad) a matar cuando estaba dando la buena nueva, sea, la Ecología cuándo serás mía es la única salida, hay que volver a las orígenes o raíces y abandonar de una vez por todas la sucia civilización moderna asquerosa.

El clan del oso cavernario + La inspectora del Baztán + El silencio de los corderos + En busca del fuego + Babe, el cerdito valiente + La bruja vampiro + El último superviviente + Juan Luis Arsuaga + Supervivientes + El clan de Manson + Frank (y George) de la jungla + La ballena (ahí le has dado, dos por uno) + Rodríguez de la Fuente + Asesinos natos (en el poco fondo cromañones somos, si nos dan rienda suelta, jodienda y barbarie a toda hora, lo que pasa es que estamos domados, claro).